La diosa del amor me muestra los colmillos,Que carne tan dulce le entrego con mi cuerpo,Misteriosamente la pasión me ha llevado a su cueva,Sin ojos vendados, sin artimañas ni trucos.
En tu sacrificio voy hacia ella y me arrojo en sus brazos,Quiero fundirme en el sentimiento de amarte,Mi corazón late lento como el de una inmensa ballena,Y cada latido es como una campana que suena en tu cuarto.
Espero que oigas la verdadera llamada del amor golpeando tu puerta,He renunciado a mí mismo para hacertela llegar,Ya no soy dueño de mis actos, soy tuyo nada más,Y a veces ni siquiera esto en la tragedia del amor es suficiente

....27/8/08